Milei dispuso un tope salarial del 1.5 % para los aumentos estatales de enero, y del 1.2% para febrero, tendencia que busca imponer también para el conjunto de los trabajadores, estableciendo paritarias por debajo de la inflación manipulada por el gobierno. El argumento del liber-facho es que en 2024 los salarios “ganaron” por haber crecido un 119% sobre un 117% de inflación, sobre un cálculo de la inflación proyectada, no de la real. Si se contabiliza el shock devaluador del 118% del 13 de diciembre 2023 de Milei, la inflación fue del 152% (CEPA, diciembre 2024), jamás recuperada por ningún sector asalariado, lo cual plantea una reducción brutal.
Los gobernadores de todos los colores están en la misma posición, como lo declaró el Ministro de Educación de Santa Fe, José Goyti, que replica al facho de Milei: “cuando uno computa números del 2024, la actualización salarial estuvo por encima de la inflación en la provincia de Santa Fé” (El Litoral, 6.02).
El gobernador Pullaro, Goyti y cía, deberían escuchar a uno de los suyos. Según un informe de la consultora Empiria, de Hernán Lacunza, ex Ministro de Economía de Mauricio Macri, “desde la asunción de Javier Milei hubo una pérdida promedio del 14% del salario disponible, o sea de ingresos menos gastos fijos como servicios, transporte y alquileres (7.12.24)”.
Salarios y jubilaciones, piedra basal de la economía de Milei
El mismo informe de CEPA señala que “dos factores han sido claves para explicar la desaceleración (inflacionaria). Por un lado, la sensible caída del consumo le colocó un techo a los precios no regulados de la economía (los únicos no regulados son los salarios y jubilaciones). La pérdida del poder adquisitivo fue el mayor límite al crecimiento de los precios del consumo masivo, como alimentos y productos de cuidado”.
El ajuste draconiano de salarios y jubilaciones, de acceso a la salud vía desmantelamiento de obras sociales y del PAMI, son cruciales para el gobierno y los capitalistas, para sostener los acuerdos con el FMI, subsidiar a las patronales y mantener anclado el tipo de cambio.
Paritarias docentes en terreno de conflicto
Todos los salarios docentes –desde el maestro sin antigüedad hasta los primeros cargos jerárquicos-, en prácticamente todo el escalafón y toda la línea de antigüedad, están por debajo de la línea de pobreza, una afrenta que la burocracia sindical de Ctera viene permitiendo desde hace décadas y que ahora profundiza.
Sin embargo, las luchas provinciales docentes que se desenvolvieron contra las paritarias a la baja de Milei, los gobernadores y la política de la burocracia sindical de Sonia Alesso y Roberto Baradel durante todo el 2024, han sido una línea de resistencia a esta destrucción salarial.
Efectivamente, según datos del INDEC, en el primer semestre de 2024, el ingreso promedio en los hogares pobres –que incluye a un amplio porcentaje de los trabajadores formales del país- fue de $407.171, contra un salario promedio de $628.000 de un maestro de grado con 10 años de antigüedad en las provincias.
Milei desde el estado nacional, y los gobernadores en cada una de las provincias, van por un ataque aún mayor, que abrirá un escenario de conflicto con independencia de los ritmos que pueda imponer a la lucha la base docente, que deberá superar las entregas de la burocracia de Ctera.
La burocracia de Baradel en Suteba ya dio el primer paso, firmando un acuerdo misérrimo con el gobernador Kicillof de 7% en enero y 2% en febrero. La inflación de enero se la calcula alrededor del 3%, lo que coloca esta entrega incluso por debajo de la inflación manipulada de Milei desde octubre, momento en que se cortaron los aumentos en la provincia de Buenos Aires. En Mendoza, la burocracia celeste del SUTE rechazó una propuesta similar a la que aceptó Baradel: 9% en el semestre. En la misma orientación, en La Rioja, el gobernador Quintela ofrece un salario inicial de $550 mil (55% por debajo de la línea de pobreza); el gobernador Vidal, en Santa Cruz plantea de febrero a agosto un 9.8% frente al 50% en una cuota que reclama ADOSAC; los diversos sindicatos burocráticos de San Juan rechazaron la propuesta inicial de incremento según la inflación anunciada, porque no recupera nada de lo perdido; en Corrientes, el SUTECO-Ctera reclama recomposición, porque “desde octubre de 2024 no se aplican aumentos reales al salario básico. En 2024 el haber docente acumuló 85% de actualización, mientras que la inflación superó el 117% anual. Acumulamos más de un 40% de retraso salarial, respecto de la inflación, al primer bimestre de este 2025”.
La decisión de Milei y los gobernadores de absorber sus déficits aumentando la pauperización de la docencia, y la política de la burocracia de Ctera de ser garante de este ataque histórico que implanta techos de pobreza a las paritarias, abre un escenario de conflicto que dominará seguramente todo el año.
Nuestro planteo
Restituir paritaria nacional. Paritarias nacional y provinciales libres, con paritarios electos en asamblea. Salario inicial nacional igual a la canasta básica, hoy de $1.200.000, y respeto a todas las categorías salariales estatutarias. Defensa de las jubilaciones de las cajas especiales docentes y del 82 % móvil; Fuera cualquier tipo de presentismo y derogación de los existentes; fin del vaciamiento de las obras sociales y recomposición de sus presupuestos, bajo control de lxs trabajadores; defensa de los estatutos y fin de la precarización laboral docente con cargas laborales insostenibles.
Restitución de todos los fondos nacionales arrebatados por el gobierno de Milei, presupuesto educativo nacional con un piso del 10% del PBI; becas para todxs lxs estudiantes.
Organizar y desenvolver desde los sindicatos y seccionales combativos un plan de acción para derrotar la ofensiva de Milei y los gobernadores y la entrega de la burocracia peronista de Ctera.