El ataque a la educación pública y al trabajo docente pegó un salto en el último año. Hace años que nuestro salario y nuestras condiciones de trabajo se venían degradando, pero desde diciembre 2023 sufrimos una combinación de caída salarial, despidos docentes, cierres y reformas que no tiene precedentes.

Jorge Macri se sumó con entusiasmo al plan motosierra y en poco más de un año nos robó alrededor del 20% de nuestro salario. La convocatoria mensual a la mesa salarial quedó en el pasado y ahora hasta abril no hay ningún ofrecimiento. 

En el nivel medio y CENS, la combinación de la reforma BA Aprende y los cierres de curso están significando el despido de cientos de docentes y una reducción en términos absolutos de los cargos disponibles.

En primaria, el gobierno impuso un nuevo diseño curricular que, con la coartada de un enfoque “científico”, profundiza el vaciamiento literario y cultural de las escuelas.

Las primarias de adultos están bajo amenaza de cierre, igual que la modalidad especial que destruyen en nombre de la “inclusión”.

En inicial, el gobierno aprovechó la baja en la natalidad para meter la motosierra: cierra salas y achica cargos docentes, en vez de priorizar la universalización real de todo el nivel inicial, ampliar la oferta y sostener parejas pedagógicas en las salas. Y al mismo tiempo que cierran salas por “baja matrícula”, se abren espacios de precarización como los CPI.

En los profesorados, bloquearon durante semanas la inscripción a los postítulos que sólo se habilitó parcialmente gracias al reclamo docente. En esta pelea se destacaron las docentes del postítulo de ESI del JVG, conscientes de que el ataque a la ESI forma parte de la “batalla cultural” de los Macri y Milei.

Tribuna Docente llama a hacer frente a esta ofensiva bárbara. La única forma de frenar los despidos, de recomponer el salario y de restituir el valor de la escuela pública es con la organización de las escuelas. Las movilizaciones del 1F y del 8M así como los paros boicoteados por la burocracia sindical muestran que tenemos con qué. 

Abramos el debate, votemos delegadxs, impulsemos asambleas y reclamos por escuela. Construyamos la unidad de toda la docencia para luchar contra el plan de destrucción de Milei y Macri.