Con Macri y Milei, Buenos Aires NO APRENDE

Hace 17 años que el partido de los Macri gobierna la Ciudad. Es un tiempo considerable. Hoy hay docentes que transitaron su educación primaria, secundaria y terciaria bajo esta gestión. Sin embargo, para el gobierno los problemas de la educación son siempre culpa de otros: los sindicatos, los docentes, la cuarentena, la psicogénesis, pero su política no tiene nada que ver.

El lanzamiento del plan “Buenos Aires Aprende” sigue esta orientación. Otra vez nos prometen renovar la escuela sin ningún balance de lo que fueron las anteriores “renovaciones”. Tal es el cinismo que la Ministra de Educación dice en Infobae que “con toda la inversión que se hace (…) lo que no estamos haciendo bien es seguir insistiendo con un modelo escolar que se impone hace años”. Esto cuando la inversión en educación cayó del 27 al 17% del presupuesto y cuando el modelo que “se” impone hace años es el modelo que su gobierno impone hace años.

Ministra: si caen los aprendizajes, si nuestros pibes no entienden lo que leen, si no pueden responder un problema matemático, es el resultado de su política educativa. Ahora nos quiere convencer de que la solución sería pasar de asignaturas al trabajo “interdisciplinario” ¡lo mismo que nos dijeron hace 10 años con la Nueva Escuela Secundaria! Los resultados están a la vista y si la degradación no es mayor es porque los docentes resistimos al vaciamiento de contenidos que baja del ministerio.

A la destrucción de la escuela primaria y secundaria le sigue lógicamente la formación docente. ¿Cuál es el sentido de formar durante 4 o 5 años un Profesor de Historia, si después va a enseñar “sociales”? ¿Para qué formar maestras con conocimientos disciplinares sólidos y con capacidad crítica, si el nivel inicial y la primaria va a ser una guardería? Por eso el ataque a los profesorados. En las carreras de primaria e inicial quieren implementar nuevos planes de estudio que reemplazan la ESI por la “educación emocional”. Y para el nivel medio buscan avanzar en una formación ultra-genérica como ya rige en la UniCABA.

La educación especial y la educación de adultos no tiene lugar en esta visión, por eso allí prima el vaciamiento, traslados y cierres.

Con este boletín queremos aportar a un entendimiento conjunto de la política del gobierno. Así vamos a estar en mejores condiciones de dar cada una de las peleas que tenemos planteadas.

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